El Aneto pierde a su perro guardián
El refugio de La Renclusa y el hotel Llanos del Hospital comunicaron este lunes una triste noticia: la muerte de Norte.
Para los que no lo conocían ni habían oído hablar de él, Norte era el perro guardián del Aneto. Un can sin dueño, abandonado por algún turista en Benasque y que decidió estar entre la Renclusa y los Llanos del Hospital, dependiendo de la temporada, acompañando a los montañeros en sus excursiones, ascensiones a picos o rutas en travesía o raquetas.
El usuario de Twitter 'Benasque', que ofrece información puntual, valiosa e imágenes del Pirineo, ha explicado en pocos tweets la historia de Norte.
En días de ventisca, ha servido de guía a montañeros perdidos que tenían grandes dificultades para encontrar la ruta de regreso. Un sherpa en toda regla. pic.twitter.com/xhoCyZgpH7
— Benasque 🏔️ (@Benasque_) March 26, 2022
En días de ventisca, ha servido de guía a los alpinistas perdidos que tenían grandes dificultades para encontrar la ruta de regreso. Un sherpa en toda regla.
Cerca de cumplir los 20 inviernos, se había convertido en un habitante más del valle de Benasque, contribuyendo a hacerlo un lugar más especial si cabe.
En sus cuatro sus patas sumaba centenares de tresmiles y varios Anetos y seguía disfrutando de cada ruta como si fuera la primera. Siempre dispuesto a seguir y guiar a los nuevos alpinistas que llegaban al valle de Benasque.
Su estado de salud era muy delicado desde que a mitad del pasado invierno sufriera un ictus que le dejó prácticamente sordo y ciego. Debido a su avanzada edad, no podía moverse mucho.
La noticia ha provocado un aluvión de condolencias entre los aficionados a la montaña.
🐶 No desea que se acabe la estirpe de guías y ha dejado una buena camada para que continúen con la “profesión”. pic.twitter.com/FA69ipZJPx
— Benasque 🏔️ (@Benasque_) March 26, 2022
Norte no deseaba que se acabase la estirpe de guías del Aneto y ha dejado una buena camada como herencia. Descansa en paz.