La joya oculta de la Costa da Morte que enamora con su naturaleza virgen y su patrimonio milenario
Cee, enclavado a medio camino entre A Coruña y Santiago de Compostela, se alza como el umbral al mar en el corazón de la mítica Costa da Morte.
Este destino, rico en historia y tradición, fusiona la fuerza de paisajes salvajes con un legado cultural que se remonta a siglos atrás, convirtiéndose en un imprescindible para peregrinos y viajeros en busca de autenticidad.
El municipio se adentra en el océano a través de tres fragmentos costeros, donde la imponente Ría de Corcubión se curva en un abrazo natural, mientras la discreta Ría de Lires, la más pequeña de Galicia y protegida por la Red Natura 2000, realza la singularidad ecológica del lugar.
Distribuido en seis parroquias –A Ameixenda, Brens, Cee, Lires, A Pereiriña y Toba–, Cee ofrece una diversidad de rincones y playas que invitan al descubrimiento: desde la urbana A Concha hasta la belleza virgen de la Playa de Gures y el secreto encanto de la Playa de Caneliñas, sin olvidar el arenal de As Leiriñas, situado cerca del emblemático Castillo del Príncipe.
Más allá de sus impresionantes playas, Cee es un crisol cultural. Su patrimonio civil se refleja en monumentos como el Antiguo Castillo del Príncipe y en casonas de piedra que narran la historia de un pueblo forjado por la tradición marinera.
El legado etnográfico se plasma en los molinos, hórreos y cruceros, mientras que su patrimonio religioso brilla en templos como la Iglesia de San Xián de Pereiriña y el Santuario de Nuestra Señora da Xunqueira.
No es de extrañar que, para muchos peregrinos, Cee sea la primera visión del mar en su travesía hacia Finisterre. Sin embargo, su atractivo va mucho más allá de la ruta del Camino de Santiago. Conocido también como destino Starlight, este enclave regala noches de cielo estrellado que invitan a la reflexión y al asombro.
En definitiva, Cee no es solo un lugar en el mapa, sino una experiencia sensorial y cultural que abraza al visitante con la paz de sus costas y la intensidad de su historia.
Un refugio donde la naturaleza y la tradición se funden, ofreciendo a quienes se atreven a explorar, un pedazo de la verdadera esencia de la Costa da Morte.
