El Festival Internacional de Esculturas de Hielo y Nieve de Harbin: Una maravilla gélida que impulsa la economía
Harbin, la capital de la provincia de Heilongjiang en el norte de China, se viste de blanco cada invierno para acoger el Festival Internacional de Esculturas de Hielo y Nieve, un evento que ha cautivado a millones de visitantes desde su inicio en 1963.
Este festival, que oficialmente se inaugura el 5 de enero y se extiende hasta marzo, ha crecido hasta convertirse en una celebración monumental que abarca tres parques temáticos: el "Sun Island International Snow Sculpture Art Expo", el "Harbin Ice and Snow World", y el "Zhaolin Park Ice Lantern Fair".
La 40ª edición de este festival se celebra en un impresionante parque de 810.000 metros cuadrados, con 250.000 metros cúbicos de hielo procedente del Río Songhua.
En un esfuerzo por crear un ambiente inigualable, 13 ciudades de la provincia de Heilongjiang han contribuido con más de 350 instalaciones públicas de hielo y nieve de gran escala.
Uno de los puntos culminantes del festival es el tobogán de hielo de 521 metros, que atrae a visitantes de todas partes.
Aunque las temperaturas en Harbin pueden descender hasta -24°C, la belleza de las deslumbrantes esculturas de hielo hace que los turistas consideren que vale la pena soportar el frío.
Para garantizar una experiencia cómoda, se han instalado numerosas estaciones de descanso gratuitas y cálidas en las principales atracciones turísticas.
El evento ha demostrado ser un importante motor económico para Harbin, especialmente en un contexto de recuperación pospandemia.
Durante los tres días de vacaciones de Año Nuevo, la ciudad recibió un récord de 3,05 millones de visitas, generando ingresos por turismo que alcanzaron los 5.910 millones de yuanes (828 millones de dólares).
Estos números récord destacan la importancia del festival como una herramienta clave para impulsar la economía local.
Harbin, una vez clasificada entre las 10 ciudades con economías más importantes de China, ha experimentado una reducción de su población en los últimos 20 años, así como una disminución en su posición económica.
La ciudad ha enfrentado desafíos relacionados con la decadencia de empresas estatales, tecnología y gestión rezagadas, y el agotamiento de recursos como el petróleo y el carbón en las regiones circundantes.
En este contexto, el Festival Internacional de Esculturas de Hielo y Nieve emerge como una pieza clave para la revitalización económica. La afluencia masiva de turistas no solo impulsa los ingresos locales, sino que también coloca a Harbin en el mapa como un destino turístico de invierno de renombre.
A pesar de los desafíos económicos, el encanto único del festival continúa atrayendo a visitantes nacionales e internacionales, convirtiendo a Harbin en un faro de luz en medio del frío invierno chino.