Lleida apuesta por el oleoturismo como motor turístico y económico
En el marco de la segunda edición del benchmark organizado por el Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida y la Agencia Catalana de Turismo (ACT), las Tierras de Lleida han reforzado su apuesta por el oleoturismo como una experiencia turística de calidad. El evento, que se celebró entre Les Garrigues y Urgell, tuvo como objetivo destacar el valor del aceite de oliva en la demarcación y su potencial como motor económico y cultural.
El director del Patronato, Juli Alegre, destacó la importancia del turismo para convertir Lleida en un mejor lugar para vivir, mientras que la alcaldesa de La Granadella, Elena Llauradó, subrayó el impacto económico del aceite de oliva en la comarca de Les Garrigues.
El encuentro, con un enfoque formativo, contó con la participación de 25 profesionales del sector, entre ellos productores de aceite, técnicos de turismo, restauradores y gestores de hoteles gastronómicos. Durante la jornada, los asistentes visitaron el Centro de la Cultura del Aceite y el Museo del Aceite de Catalunya en La Granadella, así como varios molinos de la región.
Entre los momentos destacados, el chef Xavier Benet del restaurante Hostal Benet en Les Borges Blanques ofreció un menú maridado con aceite de oliva virgen extra en el molino Cuadrat Valley, parte de la DOP Les Garrigues. Por la tarde, las actividades se trasladaron al Mas de Colom - Casa Borges en Tàrrega.
El oleoturismo no solo fomenta la economía local, sino que también ayuda a preservar los paisajes agrarios de las Tierras de Lleida, una región que se enfrenta al reto de la despoblación. Como parte de su estrategia, el Patronato lanzó en 2020 el proyecto Oleoturismo de Lleida. El sabor de la tierra, que incluye 38 experiencias en las comarcas de Les Garrigues, Segrià, La Noguera, Urgell y Pallars Jussà.
