La tecnología móvil, clave en los rescates de Peñalara y Gredos durante el temporal
El mal tiempo de este fin de semana, marcado por los últimos coletazos de la borrasca Martinho, ha puesto en alerta a los equipos de rescate en varias zonas montañosas del país. En la sierra de Guadarrama, dos excursionistas fueron rescatados tras desorientarse a causa de la ventisca en la zona de Peñalara (Madrid).
Según ha informado la Guardia Civil, los dos montañeros, vecinos de Alcalá de Henares, perdieron el rumbo durante una ruta por el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, cuando una intensa ventisca redujo drásticamente la visibilidad. Afortunadamente, pudieron compartir su ubicación a través del teléfono móvil, lo que permitió al Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) localizarlos rápidamente.
Tras recibir el aviso, los agentes accedieron al lugar a pie, ayudados por el posicionamiento GPS enviado por los excursionistas. Pese a las complicadas condiciones meteorológicas, lograron encontrar a los dos montañeros con síntomas leves de hipotermia, y los acompañaron hasta una zona segura sin que fuera necesaria asistencia sanitaria.
Más rescates durante el fin de semana
El caso de Peñalara no ha sido el único. En la Sierra de Gredos, en la provincia de Ávila, otros dos esquiadores fueron también localizados gracias a la tecnología móvil tras extraviarse en la montaña. En esta ocasión, la alerta llegó de forma automática al sistema de emergencias, activando al GREIM de El Barco de Ávila y al Servicio Aéreo de la Guardia Civil, que quedó en reserva por si era necesaria su intervención aérea.
Tragedia en el Moncayo
El temporal también ha dejado consecuencias trágicas. En el Moncayo (Navarra), tres montañeros —todos varones, de entre 63 y 65 años y vecinos de Madrid— fallecieron tras sufrir un accidente en la zona de El Escupidero, una zona conocida por su peligrosidad.
La Guardia Civil ha abierto una investigación, y los servicios de emergencia han recordado la importancia de no adentrarse en rutas de alta montaña en condiciones adversas. Un bombero que participó en la operación calificó la decisión de continuar la ruta como "una imprudencia grave".