La caída de un sérac en el Mont Blanc du Tacul provoca un alud que sepulta a dos alpinistas
Un desprendimiento de hielo en el flanco este del Mont Blanc du Tacul provocó una avalancha de gran magnitud que sepultó a dos alpinistas, rescatados con vida minutos después.
El pasado jueves 8 de mayo, entre las 10:30 y las 10:40 h, una masa de hielo de aproximadamente 60.000 m³ se desprendió del frente del glaciar suspendido en el flanco este del Triangle du Tacul, a unos 3.750 metros de altitud. El colapso desencadenó una avalancha de gran magnitud que barrió la vertiente norte en dirección al Col du Midi y, de forma excepcional, empujó una segunda lengua de nieve y escombros hacia el Bassin du Géant.
Las imágenes captadas por la webcam de la Aiguille du Midi mostraron con claridad la caída del sérac y el inicio de la colada de hielo y polvo blanco, evidenciando la rapidez y la violencia del fenómeno.
Dos alpinistas que transitaban por la zona quedaron sepultados bajo la avalancha, pero fueron rescatados con vida gracias a la rápida intervención del Pelotón de Gendarmería de Alta Montaña (PGHM) de Chamonix, que logró localizarlos y liberarlos en cuestión de minutos. Ambos sufrieron heridas leves y fueron evacuados para recibir atención médica. Un tercer montañero, que se encontraba en las proximidades, resultó ileso y también fue asistido por el equipo de rescate.
Para el geomorfólogo Ludovic Ravanel, director de investigación en el CNRS, este tipo de desprendimientos forma parte de la dinámica natural de un glaciar suspendido: “La evolución progresiva de las fracturas internas acaba provocando desprendimientos periódicos”, declaró tras el suceso, recordando que el pasado 26 de abril el mismo sérac ya había mostrado signos de debilidad y originado una avalancha menor, sin consecuencias graves.
El sector este del Mont Blanc du Tacul, en particular la ruta Contamine–Négri con pendientes de entre 50 y 55 grados, es conocido por su inestabilidad estacional. Las oscilaciones térmicas propias de la primavera favorecen el aflojamiento del hielo y multiplican las fracturas en los frentes glaciares.
Históricamente, esta cara norte del Tacul ha sido escenario de tragedias, como la avalancha de agosto de 2008, en la que un desprendimiento similar provocó la muerte de ocho alpinistas y dejó varios heridos.
